Quemar hojas de laurel en casa: un remedio natural para la mente, el cuerpo y las emociones

22/06/2025

El laurel no solo es una planta aromática usada en la cocina; también ha sido valorada durante siglos por sus propiedades terapéuticas. Una de las formas más tradicionales de aprovechar sus beneficios es quemar sus hojas secas, práctica que se ha popularizado por sus efectos positivos sobre el bienestar físico, mental y emocional.

Quemar hojas de laurel en casa no solo libera un aroma agradable, sino que también puede generar un ambiente relajante y purificador.

¿Qué beneficios tiene quemar hojas de laurel?

Según diversas tradiciones y usos populares, esta práctica puede:

Mejorar la concentración: Su aroma ayuda a despejar la mente, lo que favorece la atención y el enfoque.
Mejorar la capacidad respiratoria: Los compuestos volátiles del laurel pueden despejar las vías respiratorias, siendo útil en casos de congestión leve.
Fortalecer el sistema inmune: Sus aceites esenciales tienen propiedades antimicrobianas que ayudan a purificar el ambiente.
Reducir la inflamación: El laurel contiene eugenol y otros compuestos con propiedades antiinflamatorias.
Aliviar la ansiedad: El humo del laurel genera un efecto calmante que ayuda a reducir el estrés y la tensión emocional.
Fortalecer el estado mental y emocional: El ambiente que se crea al quemar laurel puede inducir una sensación de tranquilidad y equilibrio mental.

¿Cómo quemar hojas de laurel correctamente?

Materiales necesarios:

Hojas secas de laurel (pueden ser de cocina)
Un recipiente resistente al calor (como un cuenco de cerámica o una concha de abulón)
Un encendedor o cerillo
Ventilación adecuada

Instrucciones:

Coloca una o dos hojas secas de laurel en el recipiente resistente al calor.
Enciende la hoja por una punta. Deja que arda unos segundos y luego apaga la llama para que comience a soltar humo.
Permite que el humo se expanda por la habitación mientras respiras profundamente (si no eres sensible al humo).
Ventila bien el espacio después de unos minutos.

Recomendaciones:

Realiza esta práctica en espacios abiertos o con ventanas abiertas.
No la hagas cerca de niños, personas con asma o mascotas.
Usa solo hojas secas y naturales, sin aditivos ni perfumes artificiales.
Nunca dejes el recipiente con el laurel encendido sin supervisión.

¿Cuándo hacerlo?

Al comenzar el día, para activar la mente y mejorar la concentración.
Al final de la jornada, para relajarte y aliviar el estrés acumulado.
Antes de una práctica de meditación o de estudio.

Conclusión
Quemar hojas de laurel es una práctica ancestral con beneficios reconocidos tanto por la medicina popular como por el uso moderno en la aromaterapia. Si se hace con precaución, puede ser una herramienta sencilla y natural para cuidar el bienestar físico y emocional desde casa.